La unión hace la fuerza es un lema universal y hay un grupo de hombres y mujeres emprendedores de la Región del Biobío probaron como cierto.

Estas personas, con esfuerzo, perseverancia, gracias al mismo empuje con que crearon pequeñas y medianas empresas generando empleo para ellos y otros, comenzaron desde 2015 a formar una organización inédita en el país: la Asociación Gremial de Pequeñas y Medianas Empresas Asociadas al Sector Pesquero de la Región del Biobío, PescaPyme. Buscan beneficios y mejoras para las 370 con 4 mil trabajadores de la región, aunque tienen 78 asociados.

«Empezamos con 15. Vamos creciendo y es porque hemos tenido logros tan importantes como conseguir ser escuchados por las gerencias de las empresas de pesca industrial, sector al que prestamos servicios, y autoridades. Con conquistas concretas: estar en la mesa, poner en debate nuestras aspiraciones y conseguirlas, en algunos casos, como el pago de las facturas a 30 días, mucho antes de que se legislara respecto de ello».

Lo destacan Yuri Salinas, presidente y Mauricio Silva, secretario de la organización, quienes comentan que las empresas que representan tienen entre 10 y 30 trabajadores y , aunque en lo particular cada pyme negocia lo específico de su servicio con la industria, en asuntos como habitabilidad, es decir espacios apropiados para que las y los operarios y operarias se cambien de ropa o realicen sus colaciones, las conversaciones parten en contactos de la directiva de PescaPyme.

«Tenemos muy buenas relaciones con las jefaturas de las industrias. Independiente de los aspectos de negociaciones naturales, somos reconocidos y valorados. La industria ya sabe quiénes somos y dónde estamos, qué queremos. Somos la columna vertebral de la industria pesquera de la Región del Biobío que es la primera región pesquera del país», acotan.

Servicios

Salinas explica que ofrecen servicios de descarga de pesca, transporte de ella, seguridad, casino, mantención de redes y de flota, fabricación y provisión de hielo, entre otros.

Los planes, lo que beneficiaría a PescaPyme y a las empresas asociadas es que más de ellas se sumen. Juntos pueden reunir la fuerza para batallas que consideran claves: llegar al Estado para que haya adecuación de requisitos en la postulación a financiamientos fiscales, por ejemplo. Actualmente los que se adjudican estos dineros no deben tener ni la menor deuda con el fisco, no pueden tener imposiciones declaradas y sin pagar o convenios de pago. Eso, aseguran los dirigentes, es prácticamente imposible para una pyme real, del mundo real, aunque con el pago a 30 días confían se podrá mejorar.

Otro asunto es que los financiamientos son para productos y no para servicios como al fin y al cabo es el «producto» de las empresas PescaPyme: «quisiéramos que hubiera apoyo a los servicios de las pequeñas y medianas empresas, que pudiéramos – dado el caso- ir a presentarlos al extranjero o, también, organizar una feria en la región a la que vivieran empresarios de otras regiones. Vamos a reuniones, seminarios, capacitaciones y chocamos contra estos muros, más empresas unidas creemos no puede dar mayor fuerza».

Contingencia
Asimismo, PescaPyme se ha reunido con los sindicatos de trabajadores directos de las industrias pesqueras y están cohesionados «para ver si podemos seguir trabajando ante la embestida de iniciativas legales que como la próxima puesta en marcha de la Ley Jibia nos significará una importante merma en los empleos», dicen explicando que se trata de una norma que dejará el recurso jibia ( 160 mil toneladas cuota/país) en manos del sector artesanal que tiene derecho a capturar el 80%. Las industrias del rubro han dicho que deberán paralizar barcos, cerrar líneas y no llevar adelante proyectos de plantas pues no pueden capturar sino con método artesanal desde agosto. Eso preocupa a PescaPyme: «si elllos ( la industria) se empequeñecen nosotros también». La invitación de los dirigentes es a que más empresas se les sumen. A tiempos difíciles aplicar sabiduría tan antigua como las moralejas de fábulas de Esopo que dice en una que la fuerza reside en la unión.

Llamado a asociarse para conseguir metas cada vez más necesarias.